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Alojarse en un pueblo medieval de gran belleza con sólo 300 habitantes debe ser toda una experiencia. Y esto precisamente se puede experimentar en Guimerá, que se encuentra situado en la Comarca de L´Urgell de la provincia de Lleida.

Allí se levanta la casa rural Ca l’Anxica, que es muy confortable restaurada con madera rústica y piedra centenaria desde el cual se puede observar al pueblo, la montaña y el valle rodeado de olivos, almendros, bosques de pinos y encinas. Todo lo necesario para tener una estancia inolvidable.

Esta casona tiene capacidad para 10 personas que dispone de 220 metros cuadrados de jardín. Y como está aislada cerca del pueblo, el huésped tiene la seguridad de estar alejado del bullicio para el relajamiento deseado.

La distribución de la casa permite que en planta baja haya un amplio recibidor, con una habitación triple con baño completo adaptado a personas con minusvalía, con salón con sofá, TV LED, chimenea y equipo de música con acceso a una cocina-comedor con vitrocerámica, horno, lavavajillas, microondas y todos los utensilios de cocina necesarios.

Por ora parte, en la primera planta hay una habitación triple con baño completo (1 cama de matrimonio y 1 simple) y una habitación doble con baño completo.

En su exterior, la casona dispone de un jardín de 220 m2 con piscina, muebles de jardín, barbacoa, ping-pong, futbolín, canasta de básquet, porche y solarium-jacuzzi con vistas al jardín y aparcamiento privado

En cuanto a las actividades al aire libre, los huéspedes disfrutarán de senderismo, bicicleta de montaña, golf, paseos a caballo, rutas gastronómicas, rutas gastronómicas por la comarca hasta u recorrido a los molinos de aceite de la comarca.

A 14 km se localiza Tarrega, que es la capital de la comarca de Urgell, cuyo atrayente centro histórico de la ciudad está rodeado del Ayuntamiento (siglo XVII), de la Iglesia de Santa María de l'Alba (siglo XVII) y muy cerca al Parque de Sant Eloi y el Palau dels Marquesos la Floresta (Siglo XII) y el Teatro Ateneu (1922).

El visitante también puede desplazarse a Bellpuig (a 24 km) donde sobresale la iglesia parroquial que está dedicada a San Nicolás que data del siglo XVI, el Convento Franciscano de San Bartolomé construido en 1507 y el Castillo de los Barones que data de 1079 y renovado en 1472 para ser fortificado durante la Guerra de Sucesión española.